Recordando el primer belén viviente, creado por san Francisco de Asís en Greccio (Italia), el primer Papa franciscano, Nicolás IV, hizo que Arnolfo di Cambio reprodujera la escena de Belén en mármol; la obra cosechó un gran éxito, no solo en la historia del arte.
Escuche a Andreas Raub, responsable artístico-científico de la Basílica Papal de Santa María la Mayor.